La importancia de la negociación en la relación padres-hijos: cómo establecer límites efectivos
A medida que crecen los Niños, la negociación se convierte en una herramienta clave que nos permite establecer límites claros y al mismo tiempo fomentar su desarrollo y toma de decisiones.
Equipo KIDS UP
1/12/20243 min read


La etapa de la adolescencia es un momento crucial en la vida de nuestros hijos, donde comienzan a experimentar cambios físicos, emocionales y sociales significativos. A medida que crecen, es natural que busquen más autonomía e independencia, lo que puede generar conflictos y tensiones en la relación con sus padres y cuidadores. En este contexto, la negociación se convierte en una herramienta clave que nos permite establecer límites claros y al mismo tiempo fomentar su desarrollo y toma de decisiones.
Es importante entender que la negociación no implica ceder ante todas las demandas de nuestros hijos, sino más bien encontrar un equilibrio entre sus necesidades y nuestras responsabilidades como padres. Establecer límites claros y saludables es fundamental para su seguridad y bienestar, pero también es esencial permitirles expresar sus opiniones y participar activamente en la toma de decisiones que les conciernen.
¿Cuál es el límite de una negociación con nuestros hijos?
Si bien la negociación puede ser una herramienta poderosa en la relación con nuestros hijos, también es importante establecer límites claros para evitar que se convierta en una situación de "todo se negocia". Los límites de la negociación pueden variar según las circunstancias y la edad de nuestros hijos, pero algunos aspectos generales a tener en cuenta son:
Respetar los valores y normas familiares: Si bien es importante permitir que nuestros hijos expresen sus opiniones y preferencias, no debemos comprometer los valores y normas que consideramos fundamentales en nuestra familia. Establecer límites en relación a estos aspectos es necesario para mantener la armonía y cohesión familiar.
Seguridad y bienestar: Algunas decisiones relacionadas con la seguridad y el bienestar de nuestros hijos no deben ser objeto de negociación. Estos límites deben ser claros y no negociables, ya que están directamente relacionados con su protección y cuidado.
Responsabilidades y deberes: Es importante que nuestros hijos aprendan a asumir responsabilidades y cumplir con sus deberes, como las tareas del hogar o las obligaciones escolares. Establecer límites en este sentido les ayuda a desarrollar habilidades de organización y compromiso.
¿Cómo podemos implementar la negociación?
Implementar la negociación de manera efectiva requiere de paciencia, comunicación abierta y respeto mutuo. A continuación, se presentan algunas estrategias que pueden ser útiles para establecer un ambiente propicio para la negociación:
1. Escucha activa:
Es fundamental escuchar activamente a nuestros hijos, prestando atención a sus puntos de vista y mostrando interés genuino por sus opiniones. Esto les brinda la confianza necesaria para expresarse y contribuir en el proceso de negociación.
2. Establecer reglas claras:
Antes de iniciar una negociación, es importante establecer reglas claras y definir los límites dentro de los cuales se puede negociar. Esto evita confusiones y malentendidos, y brinda un marco de referencia para el proceso de negociación.
3. Buscar soluciones creativas:
En lugar de enfocarse únicamente en posiciones rígidas, es recomendable fomentar la búsqueda de soluciones creativas que satisfagan tanto las necesidades de nuestros hijos como nuestras preocupaciones como padres. Esto implica estar abiertos a explorar diferentes alternativas y encontrar un punto medio que sea beneficioso para ambas partes.
4. Enseñar habilidades de negociación:
La negociación es una habilidad que se puede aprender y desarrollar. Como padres, podemos enseñar a nuestros hijos técnicas de negociación, como la comunicación asertiva, el manejo de conflictos y la capacidad de encontrar soluciones mutuamente satisfactorias. Esto les será útil no solo en su relación con nosotros, sino también en otros aspectos de su vida.
5. Mantener la calma:
La negociación puede generar tensiones y emociones fuertes, pero es importante mantener la calma y evitar reaccionar de forma impulsiva. Mantener una actitud respetuosa y dialogante contribuye a un clima de negociación más efectivo y constructivo.
En conclusión, la negociación es una herramienta valiosa en la relación con nuestros hijos, especialmente durante la etapa de la adolescencia. Establecer límites claros y saludables, y al mismo tiempo permitirles participar activamente en la toma de decisiones, les ayuda a desarrollar autonomía e independencia de manera segura y responsable. Implementar la negociación de manera efectiva requiere de habilidades de comunicación, paciencia y respeto mutuo, pero los beneficios a largo plazo son invaluables para el desarrollo de nuestros hijos.